Hace una década, el Hennessey Venom GT alcanzó una velocidad máxima de 435.31 km/h, estableciéndose como el automóvil más rápido, superando al Bugatti Veyron Super Sport.
Para conmemorar el décimo aniversario de este logro, John Hennessey, el CEO de Hennessey Performance Engineering, afirmó que el Venom F5 está preparado para "desplegar su máximo potencial y superar los 500 km/h".
Este hypercar texano fue concebido con la ambición de convertirse en el automóvil de producción más veloz del mundo, desplegando una potencia de 1,792 caballos de fuerza y 1,193 libras-pie de torque gracias a su motor V8 de 6.6 litros denominado Fury.
La producción del Hennessey Venom GT fue limitada a 24 unidades, y hasta ahora, 22 clientes han recibido sus respectivos ejemplares.
El CEO indicó que "superar los 483 km/h en ambas direcciones es la meta para este año. ¡Alcanzar los 500 km/h en una sola dirección sería la máxima celebración para los motores de combustión!". Es importante recordar que, a pesar de que el Venom GT se proclamó como el automóvil más veloz del mundo, dicho logro no quedó registrado en el Guinness, ya que no se pudo realizar una segunda pasada en sentido contrario, requisito indispensable para ser reconocido como récord.
Según Hennessey, lo único que les falta es encontrar una pista lo suficientemente larga para permitir que el Venom F5 alcance los 500 km/h y, al mismo tiempo, pueda detenerse de manera segura tras lograr la hazaña. Durante el desarrollo del modelo, la marca utilizó la pista de aterrizaje de la NASA en Cabo Cañaveral, diseñada originalmente para los transbordadores espaciales, pero resultó ser insuficiente, logrando alcanzar únicamente los 435 km/h en ese espacio.
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